La retención urinaria es una afección por la cual una persona no puede vaciar toda la orina de la vejiga. La retención urinaria no es una enfermedad, sino un trastorno que puede estar relacionado con otros problemas de salud, como problemas de la próstata en los hombres o cistocele en las mujeres. La retención urinaria puede ser aguda, es decir, una incapacidad repentina para orinar, o crónica, una incapacidad gradual para vaciar completamente la vejiga de la orina.
Retención urinaria aguda
La retención urinaria aguda ocurre repentinamente y dura poco tiempo. Las personas con retención urinaria aguda no pueden orinar a pesar de que tienen la vejiga llena.
La retención urinaria aguda puede causar fuertes dolores y poner en peligro la vida. Si una persona de repente no puede orinar, es importante que busque de inmediato tratamiento médico de emergencia.
Retención urinaria crónica
La retención urinaria crónica se desarrolla con el tiempo. Las personas con retención urinaria crónica pueden orinar, pero no pueden vaciar completamente la vejiga. Muchas personas con retención urinaria crónica no saben que tienen la afección porque es posible que no presenten ningún síntoma.
View full-sized image(Izquierda) Durante el flujo normal de orina, la vejiga se llena de orina y luego se vacía a través de la uretra. (Derecha) Cuando la próstata se agranda, puede presionar contra la uretra y restringir el flujo de orina de la vejiga.
¿Cuán común es la retención urinaria?
La retención urinaria aguda es común en los hombres mayores y la probabilidad de experimentar retención urinaria aguda aumenta con la edad. Durante un período de cinco años, aproximadamente 1 de cada 10 hombres mayores de 70 años y alrededor de uno de cada tres hombres mayores de 80 desarrollarán retención urinaria aguda.1
La retención urinaria aguda es mucho menos común en las mujeres. Cada año, aproximadamente 3 de cada 100,000 mujeres desarrollan retención urinaria aguda.1 La retención urinaria aguda en niños es rara.
Los investigadores no están seguros de cuán común es la retención urinaria crónica. Sin embargo, saben que la retención urinaria crónica afecta a los hombres mayores más que a cualquier otro grupo.
¿Quién tiene más probabilidad de desarrollar retención urinaria?
La retención urinaria afecta tanto a los hombres como a las mujeres, pero se presenta con más frecuencia en los hombres, especialmente a medida que envejecen. Los hombres que tienen hiperplasia prostática benigna (HPB) (en inglés), una afección por la cual se agranda la glándula prostática, tienen más probabilidad de desarrollar retención urinaria. A medida que la próstata se agranda, hace presión contra la uretra, y bloquea el flujo de orina de la vejiga. La HPB es un problema de próstata común entre los hombres mayores de 50 años.
¿Cuáles son las complicaciones de la retención urinaria?
Las personas que tienen retención urinaria pueden presentar complicaciones, como:
Infección de las vías urinarias. Cuando las vías urinarias se vacían completamente, las bacterias que normalmente entran en las vías urinarias se eliminan al orinar. Con la retención urinaria, la orina no sale del todo, lo que permite que las bacterias normalmente inofensivas se multipliquen e infecten las vías urinarias. Si la infección se propaga a los riñones, pueden presentarse problemas graves.
Lesión de la vejiga. Si la retención urinaria se deja sin tratar, la vejiga puede estirarse demasiado o por periodos prolongados. Cuando se estira demasiado o durante periodos prolongados, los músculos de la vejiga pueden lesionarse y dejar de funcionar correctamente.
Lesión renal. Las vías urinarias están diseñadas para que la orina fluya de los riñones y pase por los uréteres, luego a la vejiga y salga por la uretra. Cuando una persona tiene retención urinaria, no puede vaciar la orina de la vejiga y la orina puede devolverse a los riñones. Los riñones pueden llenarse tanto de orina que se hinchan y presionan los órganos cercanos. Esta presión puede lesionar los riñones y, en algunos casos, causar enfermedad renal crónica e insuficiencia renal.
Incontinencia urinaria. Cuando la vejiga no se vacía completamente, puede causar una fuga de orina, conocida como incontinencia por rebosamiento.
Es importante tanto para la salud de la vejiga como para el estado general de salud trabajar con un profesional de atención médica para prevenir y tratar estas complicaciones.
Bibliografía
Síntomas y causas
¿Cuáles son los síntomas de la retención urinaria?
Retención urinaria aguda
Los síntomas de la retención urinaria aguda podrían incluir:
incapacidad de orinar
dolor, a menudo fuerte, en la parte inferior del abdomen
necesidad urgente de orinar
hinchazón en la parte inferior del abdomen
Retención urinaria crónica
La retención urinaria crónica se desarrolla con el tiempo y podría causar pocos o ningún síntoma, lo que podría dificultar su detección. Si la retención urinaria crónica causa síntomas, estos podrían incluir:
incapacidad de vaciar completamente la vejiga al orinar
micción frecuente en pequeñas cantidades
dificultad para iniciar el flujo de orina, conocido como vacilación
flujo de orina lento
necesidad urgente de orinar, pero con poco éxito
sentir la necesidad de orinar después de terminar de orinar
fuga de orina sin previo aviso ni urgencia
dolor o malestar en la parte inferior del abdomen
Los síntomas de la retención urinaria aguda suelen ser graves y pueden incluir dolor abdominal e incapacidad para orinar, mientras que la retención urinaria crónica podría causar pocos o ningún síntoma
¿Cuándo debe el paciente consultar con un profesional de atención médica?
El paciente debe consultar con un profesional de atención médica de inmediato si no puede orinar o tiene un dolor fuerte en el abdomen. La retención urinaria aguda puede ser potencialmente mortal.
Si tiene alguno de los otros síntomas de retención urinaria, como dificultad para orinar, micción frecuente o fuga de orina, debe consultar con su profesional de atención médica sobre sus síntomas y posibles tratamientos. La retención urinaria crónica puede causar serios problemas de salud.
Es importante consultar a un profesional de atención médica si el paciente tiene síntomas de retención urinaria
¿Qué causa la retención urinaria?
Las causas de la retención urinaria están relacionadas tanto con un bloqueo que impide parcial o totalmente el flujo de orina de la vejiga o la uretra, como con que la vejiga no pueda mantener una fuerza lo suficientemente potente como para expulsar toda la orina.
Bloqueo o estrechamiento de la uretra o el cuello de la vejiga
Para que se pueda orinar normalmente, todas las partes de las vías urinarias deben trabajar juntas en el orden correcto. La orina normalmente fluye desde los riñones hasta la vejiga a través de los uréteres y sale por la uretra. Si se produce un bloqueo o estrechamiento en algún lugar a lo largo de las vías urinarias, es posible que la persona tenga dificultad para orinar y, si el bloqueo es grave, no pueda orinar del todo.
Los problemas médicos que podrían estrechar la uretra y bloquear el flujo de orina incluyen:
Contracción ineficaz de la vejiga (vejiga hipoactiva)
El paciente puede desarrollar retención urinaria cuando los músculos de la vejiga no pueden contraerse con suficiente fuerza o no se contraen lo suficiente como para vaciar la vejiga por completo, lo que se conoce también como vejiga hipoactiva. Las causas de la vejiga hipoactiva incluyen:
Problemas neurológicos. Se puede presentar una retención urinaria cuando hay un problema en el sistema nervioso (en inglés) que evita que los mensajes viajen desde el cerebro a la vejiga y uretra. Los problemas neurológicos tienen muchas causas, que incluyen:
Medicamentos. La retención urinaria puede ser causada por ciertos medicamentos que interfieren con las señales nerviosas que van a la vejiga, uretra o próstata. Entre los ejemplos de estos medicamentos se incluyen:
agonistas alfaadrenérgicos
anticolinérgicos y antiespasmódicos
antidepresivos
antihistamínicos y descongestionantes
antipsicóticos
benzodiacepinas
bloqueadores del canal del calcio
inhibidores de la recaptación de serotonina y noradrenalina
Cirugía. Es común desarrollar retención urinaria temporal inmediatamente después de una cirugía. Durante la cirugía, a menudo se le administra al paciente líquido por vía intravenosa (i.v.), lo que puede causar una vejiga llena. También se le administra anestesia, lo que puede impedir que sienta la necesidad de orinar a pesar de tener la vejiga llena. Además, la cirugía pélvica puede causar inflamación, tejido cicatricial y traumatismos que pueden bloquear parcial o totalmente el flujo de orina que sale de la vejiga o la uretra.
Músculos de la vejiga débiles. Es posible que los músculos de la vejiga que están débiles no se contraigan con suficiente potencia o fuerza para vaciar la vejiga completamente. Las causas de la debilidad pueden incluir:
embarazo y parto
pérdida de la potencia de los músculos de la vejiga relacionada con la edad
sobredistensión o una vejiga que se ha estirado de tal manera que los músculos están lesionados
trauma
Diagnóstico
¿Cómo diagnostican los profesionales de atención médica la retención urinaria?
Los profesionales de atención médica usan la historia clínica del paciente, un examen físico y una medición de la orina residual posmicción (en inglés) para diagnosticar la retención urinaria. El profesional de atención médica también puede solicitar pruebas de laboratorio y otras pruebas diagnósticas para ayudar a encontrar la causa de la retención urinaria.
Historia clínica
Un profesional de atención médica registrará la historia clínica del paciente y le podría preguntar sobre:
los medicamentos recetados y de venta libre que toma
los hábitos de alimentación y consumo de bebidas
los hábitos intestinales
Examen físico
El profesional de atención médica hará un examen físico, que incluirá una revisión de la parte inferior del abdomen, un examen rectal y una evaluación neurológica. Si es mujer, le hará también un examen pélvico.
Medición de la orina residual posmicción
Los profesionales de atención médica usan una medición residual posmiccional para determinar cuánta orina queda en la vejiga después de orinar. La orina restante se conoce como residuo posmiccional. El profesional de atención médica usará un catéter o un equipo de ecografía para medir la orina residual posmicción.
Los profesionales de atención médica podrían usar la información de la historia clínica del paciente, un examen físico y pruebas para ayudar a encontrar la causa de la retención urinaria
Pruebas de laboratorio
El profesional de atención médica podría ordenar las siguientes pruebas de laboratorio para buscar signos de ciertas enfermedades y afecciones que podrían estar causando la retención urinaria.
Tomografía computarizada, que usa una combinación de radiografías y tecnología computarizada para crear imágenes de las vías urinarias.
Un profesional de atención médica podría usar pruebas de diagnóstico por la imagen de las vías urinarias, como una ecografía, un cistouretrograma miccional, una resonancia magnética o una tomografía computarizada para determinar qué está causando la retención urinaria
Pruebas urodinámicas
Las pruebas urodinámicas (en inglés) son un grupo de pruebas que analizan cuán bien la vejiga, los esfínteres y la uretra almacenan y liberan la orina. El profesional de atención médica podría usar las siguientes pruebas urodinámicas para ayudar a diagnosticar la retención urinaria.
Uroflujometría (en inglés), que mide la cantidad de orina liberada del cuerpo y la rapidez con la que sale.
Estudios de presión-flujo (en inglés), que miden la presión en la vejiga y la velocidad del flujo al orinar.
Video urodinámico (en inglés), que toma fotografías y videos de la vejiga mientras se llena y vacía.
Cistometría (en inglés), que mide cuánta orina puede contener la vejiga, cuánta presión se acumula en la vejiga a medida que almacena la orina y cuán llena está la vejiga cuando el paciente comienza a sentir la necesidad de orinar.
Electromiografía (en inglés), que mide cuán bien responden los músculos a los nervios dentro y alrededor de la vejiga y los esfínteres.
Cistoscopia
Una cistoscopia (en inglés) es un procedimiento que usa un cistoscopio (en inglés), un instrumento largo y delgado, para mirar dentro de la uretra y la vejiga. El profesional de atención médica observará si el paciente presenta inflamación, enrojecimiento, signos de infección, cáncer o problemas estructurales.
Tratamiento
¿Cómo diagnostican los profesionales de atención médica la retención urinaria?
Los profesionales de atención médica tratan la retención urinaria con base en el tipo de retención urinaria, aguda o grave, y la causa.
Drenaje de la vejiga
En el caso de retención urinaria aguda, un profesional de atención médica drenará inmediatamente la orina de la vejiga usando un catéter. Eliminar la orina de la vejiga alivia el dolor y ayuda a prevenir que se lesionen la vejiga y los riñones.
Si el paciente tiene retención urinaria crónica, el profesional de atención médica intentará primero diagnosticar y tratar la causa de la retención. Sin embargo, el profesional de atención médica podría necesitar usar un catéter para drenar la orina de la vejiga si la retención continúa o se agrava.
En algunos casos, las personas con retención urinaria deben seguir usando un catéter para drenar la orina de la vejiga hasta que se pueda resolver su retención urinaria. El catéter puede permanecer en la vejiga (por un tiempo corto o largo, o de manera intermitente) al insertarse para drenarla cuando sea necesario y luego retirarse. Si el paciente tiene que usar un catéter intermitente, un profesional de atención médica puede enseñarle a usarlo.
Si la vejiga se llena demasiado, un profesional de atención médica puede usar un catéter para drenar la orina
Medicamentos
El profesional de atención médica podría sugerirle al paciente que tome medicamentos para ayudar a tratar la afección médica que está causando la retención urinaria.
Inhibidores de la 5-alfa-reductasa: ayudan a detener el crecimiento de la próstata o la encogen, lo que puede mejorar el flujo de orina. Entre los ejemplos se incluyen la dutasterida y finasterida.
Una combinación de un inhibidor de la 5-alfa-reductasa y un alfabloqueador, como la finasterida y la doxazosina o la dutasterida y la tamsulosina, podría funcionar mejor que un solo medicamento.
En algunas personas, ciertos medicamentos podrían causar retención urinaria. Si el profesional de atención médica considera que un medicamento está causando la retención urinaria, es posible que le diga al paciente que reduzca la dosis o deje de usar el medicamento.
Todos los medicamentos, incluso los de venta libre, tienen efectos secundarios. El paciente debe consultar siempre con un profesional de atención médica antes de usar cualquier medicamento por más de un par de días.
Procedimientos y dispositivos médicos
Un profesional de atención médica podría recomendar un procedimiento o dispositivo médico para tratar la retención urinaria, dependiendo de la causa de la retención. Entre los ejemplos de estos procedimientos y dispositivos se incluyen:
cistoscopia(en inglés): se usa un cistoscopio para mirar dentro de la uretra y la vejiga a fin de encontrar y eliminar bloqueos como cálculos en las vías urinarias
terapia con láser: terapia que usa un haz de luz fuerte para tratar un área de tejido prostático agrandado, rompiendo el bloqueo y reduciendo la obstrucción
levantamiento de la uretra prostática o UroLift: se usan pequeños implantes para levantar y mantener la próstata alejada de la uretra para que la orina pueda fluir más libremente
electrovaporización transuretral: un procedimiento que usa calor para vaporizar un área de tejido prostático agrandado
terapia de vapor de agua transuretral, o Rezum: terapia que usa vapor de agua para encoger la próstata agrandada
dilatación uretral: se aumenta gradualmente el tamaño de la abertura uretral estirando el tejido cicatricial, para ayudar a tratar la estenosis uretral
pesario vaginal: un anillo rígido que se inserta en la vagina para ayudar a detener el escape de orina, como en los casos de cistocele o rectocele
Cirugía
El profesional de atención médica podría considerar la cirugía para ayudar a tratar la causa de la retención urinaria si otros tratamientos menos invasivos no funcionan. Algunos de estos tratamientos podrían incluir:
extirpar parte de la próstata
reparar la estenosis uretral o tejido cicatricial del cuello de la vejiga
reparar el prolapso de los órganos pélvicos
extirpar un tumor, útero anormal o parte lesionada de una hernia discal
reparar una vejiga anormal
hacer una derivación urinaria (en inglés), un procedimiento que desvía el flujo por el que normalmente sale la orina del cuerpo
¿Cómo puede el paciente tratar su retención urinaria?
El profesional de atención médica podría recomendar que el paciente pruebe tratamientos de autocuidado, ya sea solos o además de otros tratamientos, para controlar la retención urinaria.
Fisioterapia
El profesional de atención médica podría sugerir que el paciente trabaje con un fisioterapeuta que se especialice en problemas del piso pélvico. El fisioterapeuta procurará estirar los músculos tensos del piso pélvico y enseñará al paciente a mantenerlos relajados. Los ejercicios musculares del piso pélvico, conocidos también como ejercicios de Kegel, ayudan a que los nervios y músculos que se usan para vaciar la vejiga funcionen mejor.
La fisioterapia puede ayudar a controlar los síntomas de retención urinaria
Entrenamiento de la vejiga
El profesional de atención médica podría sugerir una micción programada (orinar en momentos establecidos) para ayudar a evitar que la vejiga se llene demasiado. Otra técnica de entrenamiento de la vejiga que el profesional de atención médica podría recomendar es la micción doble (esperar un poco después de orinar e intentar de nuevo) para ayudar a asegurar que la vejiga quede completamente vacía después de orinar.
El paciente debe tomar más tiempo el baño para poder relajar y vaciar la vejiga completamente. Las mujeres deben tratar de relajar los músculos alrededor de la vejiga al orinar para facilitar la micción. Es mejor sentarse en el asiento del inodoro o ponerse en cuclillas. Inclinarse sobre el asiento del inodoro para evitar tocarlo y orinar prácticamente de pie no permite que los músculos se relajen completamente y puede hacer que la orina se quede en la vejiga.
Prevención
¿Se puede prevenir la retención urinaria?
No siempre se puede prevenir la retención urinaria, pero se pueden tomar medidas para reducir la probabilidad de desarrollar la afección.
Cambiar los hábitos de micción
El paciente debe ir al baño siempre que tenga ganas. Con frecuencia, las personas retienen la orina porque no es un buen momento para ir al baño. Sin embargo, al retener la orina regularmente se pueden desgastar los músculos de la vejiga y es más probable que se presente una infección de las vías urinarias. Las infecciones urinarias pueden causar retención urinaria.
Se debe ir al baño siempre que haya necesidad para evitar lesiones en los músculos de la vejiga
Mantenerse en sintonía con el cuerpo
El paciente debe prestar atención a la frecuencia con la que siente la necesidad de orinar. Si se hace más fácil retener la micción y se alarga el tiempo entre micciones, la vejiga podría estirarse gradualmente. Además, el paciente debe tener en cuenta si le resulta más difícil comenzar a orinar o si no puede vaciar completamente la vejiga. Ambos casos pueden ser señales tempranas de retención urinaria.
El paciente debe estar atento a cualquier cambio en los hábitos de micción después de una cirugía o una lesión grave en la espalda. Es común que se desarrolle retención urinaria, ya sea de inmediato o con el tiempo, después de una cirugía o una lesión en la espalda.
Se debe consultar con el profesional de atención médica si se presentan algunas de las señales de retención urinaria. Es posible evitar que la afección se agrave si el paciente recibe ayuda a tiempo.
Tomar los medicamentos según la indicación del médico
Los ejercicios del piso pélvico, conocidos también como ejercicios de Kegel, pueden fortalecer los músculos del piso pélvico y mejorar la función de la vejiga y los intestinos. Tanto los hombres como las mujeres pueden beneficiarse de los ejercicios musculares del piso pélvico.
Modificar la dieta y el estilo de vida
El paciente puede ayudar a prevenir la retención urinaria causada por estreñimiento haciendo cambios en la dieta y el estilo de vida. Para ayudar a prevenir el estreñimiento, se debe consumir suficiente fibra en la dieta, tomar mucha agua y otros líquidos, y hacer actividad física con regularidad.
Consumir una dieta rica en fibra puede ayudar a prevenir la retención urinaria causada por el estreñimiento
Ensayos clínicos
El NIDDK realiza y respalda ensayos clínicos de muchas enfermedades y afecciones, incluidas las enfermedades urológicas. Los ensayos clínicos buscan nuevas formas de prevenir, detectar o tratar enfermedades y de mejorar la calidad de vida.
¿Qué son los ensayos clínicos para la retención urinaria?
Los ensayos clínicos y otros tipos de estudios clínicos (en inglés) forman parte de la investigación médica e involucran a personas como usted. Cuando una persona se ofrece como voluntaria para participar en un estudio clínico, está ayudando a los médicos e investigadores a conocer más sobre las enfermedades y a mejorar la atención médica para las personas en el futuro.
Los investigadores están estudiando muchos aspectos de la retención urinaria, como:
una mejor comprensión de las causas de la retención urinaria e identificación temprana de las causas
nuevos tratamientos para esta afección
formas de prevenir la retención urinaria después de una cirugía
Mire un video del Dr. Griffin P. Rodgers, Director del NIDDK, que explica la importancia de participar en los ensayos clínicos.
¿Qué estudios clínicos para la retención urinaria están buscando participantes?
En www.ClinicalTrials.gov (en inglés) puede ver una lista filtrada de estudios clínicos sobre la retención urinaria que están abiertos y reclutando participantes. Puede ampliar o reducir la lista para incluir estudios clínicos de la industria, universidades e individuos; sin embargo, los NIH no revisan estos estudios ni pueden garantizar su inocuidad. Antes de participar en un estudio clínico, debe consultar siempre con su profesional de atención médica.
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